Sin acuerdo sobre la redacción, Diputados sesionará para tratar el articulado de la ley ómnibus
La Cámara baja retoma la sesión más larga de la historia. El oficialismo no tiene asegurada la aprobación de los puntos conflictivos
El oficialismo llegará a la sesión de este martes en Diputados sin un acuerdo cerrado con la oposición en torno a la delegación de facultades, la privatización de empresas públicas y la reestructuración de la deuda. La discusión por la coparticipación del impuesto PAIS directamente quedó clausurada por el Ejecutivo nacional, que ya le hizo saber a los legisladores que no está dispuesto a acceder al pedido de los gobernadores.
Los artículos claves se reescribirán en el propio recinto, a menos que las negociaciones vayan en una dirección diferente a la de este fin de semana. Ni el radicalismo, ni Hacemos Coalición Federal lograron las respuestas esperadas. Por ahora, ambos bloques se dedicaron a analizar puertas adentro cómo votarán cada uno de los puntos que generan rispideces internas.
Con algunas salvedades, casi todos coinciden en que no acompañarán el capítulo sobre seguridad, en especial el artículo referido a la «legítima defensa». Tampoco acuerdan con el tenor de las penas para quienes cortan calles. En cuanto al apartado de cultura, aseguran que no están los votos para que La Libertad Avanza lo apruebe.
El bloque de la UCR, que conduce Rodrigo De Loredo, y el de Hacemos Coalición Federal, que preside Miguel Ángel Pichetto, se reunieron este lunes cada uno por su lado y se concentraron en los artículos sobre la reestructuración de la deuda. Las conversaciones que mantuvieron la semana pasada para analizar esa cuestión con el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, y el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, no llegaron a buen puerto.
«Los pocos avances que conseguimos para modificar las condiciones para la reestructuración de la deuda no duraron ni veinticuatro horas», dijo a BAE Negocios uno de los diputados que está al frente de las negociaciones.
Para los radicales es preciso que quede por escrito que el debate sobre la reestructuración de la deuda en default pasará por el Congreso. En el oficialismo se mostraron proclives a aceptar el pedido, pero poco después desde la Casa Rosada dieron marcha atrás.
Lo mismo sucedió con la coparticipación del impuesto PAIS. El ministro del Interior, Guillermo Francos, les dijo -una vez más- a los diputados opositores que en el Gobierno analizarían esa posibilidad, sin embargo este lunes, en declaraciones a Radio Rivadavia, aseguró que si la oposición consigue imponer el número para aprobar ese tema, el presidente Javier Milei lo vetará.
En las bancadas opositoras que le facilitaron los votos a La Libertad Avanza para la aprobación en general del proyecto de la Ley Ómnibus dan por terminada esa discusión. Ni siquiera lograron que se convoque a los mandatarios provinciales para encontrar una solución. Saben que no hay chances de que el Ejecutivo de el brazo a torcer, debido a que significaría un agujero en las finanzas de la Nación.
Aunque las últimas versiones de los artículos sobre la privatización de empresas públicas siguen generando debate entre los radicales y los integrantes de Hacemos Coalición Federal, hay más puntos de acuerdo que en otros temas con la bancada oficialista que preside Oscar Zago.
Atrás quedó el reclamo para que se traten por separado cada una de las compañías «sujetas a privatizar». Tampoco insisten ya con que el proceso de venta sea revalidado en el recinto de ambas cámaras. El pedido es mucho más modesto, que se refuerce y amplíe la Bicameral de Reforma del Estado y Seguimiento de las Privatizaciones y se sume a la Auditoría General de la Nación (AGN).
De los listados de empresas que quedaron en pie, el único que podría ser rechazado por la oposición es el que incluye al Banco Nación, ARSAT y Nucleoeléctrica Argentina. En la UCR, la mayoría adelantó que votará en contra.
«No sabemos cómo quedará el capítulo de privatizaciones. Lo cambiaron muchas veces y no terminan de tomar en cuenta lo que les pedimos. A esta altura, no se si no entienden o no les interesa lo que les señalamos», apuntó un legislador opositor, cercano al oficialismo.
Algo similar sucede con la delegación de facultades, que aseguran no acompañarán así como está redactado. Sin este punto, el Gobierno no tiene chances de avanzar con el resto de las medidas que tiene en carpeta.
En la oposición no descartan que haya algún tipo de acercamiento en las próximas horas, sin embargo, los principales referentes parlamentarios están cada vez más convencidos que llegarán al recinto sin saber cuál será la letra de cada artículo. «Así como estamos, vamos a ir a ciegas, a cara o verdad», concluyó un diputado opositor.
Por Gabriela Vulcano