Para lograr el equilibrio, advierten que se necesita un ajuste de $11,7 billones

Eso es a valor de la moneda actual. Provincias, obra pública y subsidios permiten obtener el 82% del recorte. Advierten que el déficit inercial para el año próximo sería de 6 puntos del PBI.

El ministro de Economía, Luis Caputo, hará este martes el principal anuncio económico del gobierno de Javier Milei que, de alguna manera, echará la suerte para el resto de la gestión, tanto si sale bien como si no fuera exitoso. Dará detalles sobre un ajuste de proporciones épicas que, consideran, tiene que servir para anclar las expectativas del mercado.

Según un informe de la consultora Invecq, ese ajuste tiene que evitar que para 2024 se proyecte un quebranto de 6 puntos del PBI, aunque en rigor la firma que dirige el economista Esteban Domecq considera que el ajuste tendría que ser de 5 puntos del PBI.

Este año, cerrará con un quebranto primario equivalente a 3 puntos del PBI y, si se agregan los intereses de la deuda, sube 2 puntos. Pero en función de las estimaciones de Invecq, en la hipótesis de que el gobierno no hiciera nada y dejara intacta la estructura de gastos como de ingresos, el rojo se iría a los 6 puntos.

El ajuste tiene que ser grande, por lo tanto, siguiendo la analogía del presidente Javier Milei, tendría que tener una parte considerable a “motosierra”, pero a eso tendrá que combinarlo con el uso de bisturí para evitar afectar partidas sensibles.

Al respecto, el flamante vocero del gobierno, Manuel Adorni, anticipó que «las medidas van a ir en línea con un fuerte recorte fiscal, con alguna expansión en partidas sociales y este paquete irá acompañado con la quita de privilegios». El primer mandatario mantuvo la primera reunión de Gabinete en la Casa Rosada donde se analizó el paquete de medidas. «Se van a revisar cada una de las contrataciones y los contratos vigentes, también con universidades», anticipó.

En función de la directiva emanada por el titular del Poder Ejecutivo sobre que “no hay plata”, se supone que el ajuste deberá encararse sobre todo por el lado del gasto. Recientemente un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), que dirige el economista Nadín Argañaraz, planteó que para alcanzar el equilibrio el gobierno debería hacer un recorte de gasto del 25% respecto de 2023, en términos reales.

El informe indica que este año el sector público nacional cerraría con ingresos totales por $41 billones y gastos primarios por $47,4 billones, lo que dejaría un resultado primario negativo de $6,6 billones. Traducido como porcentajes del PBI, serían ingresos por 17,2%, gastos primarios por 19,9% y déficit primario de 2,8%. Se deben sumar intereses por $5,1 billones (2,1%) por lo cual el total del déficit del 2023 sería $11,7 billones (5,1%).

Partiendo desde ese punto, el IARAF considera que, si se eliminan las transferencias discrecionales a las provincias se cubriría el 23% del ajuste necesario. Si se suma la obra pública, el ajuste estaría cubriendo un 48,3%. Y al incorporar una eliminación del gasto en subsidios energéticosalcanzaría el 82,5% de lo requerido. Lo que resta podría salir de la eliminación del déficit de las empresas públicas.

Tomando en cuenta el valor de la moneda actual, a los $11,7 billones que déficit fiscal que quedaría este año habría que agregarle la deuda flotante, es decir, gastos devengados este año que no se pagarán y pasarán para el próximo ejercicio. De acuerdo con los últimos datos de la Tesorería General de la Nación, esa deuda era $1,8 billones en octubre.

Por Carlos Lamiral

Fuente
ambito financiero

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *