Cómo queda la relación de fuerzas en el Consejo de la Magistratura tras la designación de sus 20 miembros

El órgano que selecciona y sanciona jueces va tomando forma. Este miércoles juraron las cuatro consejeras electas y, por otro, el Congreso elevó una nota a la Corte en la que informó la designación de los dos nuevos consejeros que representarán al Parlamento.

El Consejo de la Magistratura está cada vez más cerca de empezar a funcionar con 20 miembros y de ser presidido por la Corte Suprema de Justicia. Este miércoles, por un lado, juraron las cuatro consejeras electas y, por otro, las presidencias de ambas cámaras del Congreso elevaron una nota al presidente del Alto Tribunal, Horacio Rosatti, en la que le informaron la designación de los dos nuevos consejeros que representarán al Parlamento. Si bien estos dos nombramientos aún no fueron formalizados porque no juraron -y hubo amenazas de judicializar estos nombramientos-, comienza a vislumbrarse una integración definitiva del órgano que selecciona y sanciona jueces con las dos decenas de integrantes que ordenó la Corte. Con todos los nombramientos ¿Cómo queda la nueva relación de fuerzas?

Con el nombramiento de los 7 nuevos integrantes, que se suman a los 13 consejeros que eran parte del Consejo disuelto por la Corte, se da un escenario de paridad. Es de esperar que, de no mediar reposicionamientos, en la mayoría de las votaciones se observarve dos bloques de 10 integrantes.

El de la oposición asoma, en un principio, más homogéneo. Tal como publicó este medio, estará integrado en su mayoría por representantes de la Mesa Judicial PRO a los que se suman aliados. A los 6 consejeros que solían votar juntos en la anterior conformación se suman tres representantes recientemente electos además de Rosatti.

El bloque opositor queda compuesto por:

Jimena de la Torre, recientemente electa por el estamento de los abogados, quien juró este miércoles como consejera. De la Torre integró dos de los órganos desde los cuales el gobierno de Mauricio Macri impulsó la persecución judicial: la AFIP y la UIF. Por un lado, fue jefa de gabinete de la Unidad de Información Financiera (UIF) entre junio de 2017 y abril de 2018, y tuvo dos cargos en AFIP uno previo y otro posterior a su paso por la unidad antilavado: el segundo fue de subdirectora General de Coordinación Técnico Institucional entre abril de 2018 y diciembre de 2019. Ambos organismos, UIF y AFIP, se presentaron como querellantes en muchas de las causas políticas que durante el macrismo se abrieron contra dirigentes kirchneristas, sobre todo, CFK.

Agustina Díaz Cordero (h), fue electa por el estamento de los jueces para completar el Consejo de 20 integrantes y también juró este miércoles. Es exasesora del ministro de Justicia, Germán Garavano, fue nombrada jueza civil por Macri, el 27 de abril de 2018. Su madre, la jueza comercial María Lilia Gómez Alonso, fue clave para beneficiar al expresidente en la causa Correogate.

Se descuenta que Rosatti, que representa a la Corte del Lawfare, se alineará con este bloque en más de una ocasión. Entra como presidente del Consejo de la Magistratura por decisión de él mismo y de los supremos Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda. Rosatti fue designado por Macri en el Alto Tribunal.

Roxana Reyes, diputada de la UCR por Santa Cruz. Fue formalmente designada este miércoles por la presidencia de la Cámara de Diputados a cargo de Sergio Massa. Resta su juramento para entrar en funciones. Su nombramiento fue cuestionada por un sector del oficialismo.

Pablo Tonelli, otro representante del ala dura del PRO. Diputado, es uno de los alfiles judiciales de Macri.

El abogado Carlos Matterson, que representa a la matrícula por el Interior del país. Es cercano al operador judicial del macrismo, Daniel “Tano” Angelici.

Diego Marías, abogado por la Ciudad de Buenos Aires. Es cercano al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.

Silvia Giacoppo, senadora radical por Jujuy. Vinculada al gobernador Gerardo Morales.

Juan Manuel Culotta, juez de la lista Compromiso Judicial, la más asociada al macrismo dentro de la Asociación de Magistrados.

Ricardo Recondo, juez de la lista Bordó, la más conservadora de la Asociación de Magistrados. Es expresidente de esa organización que nuclea a jueces y fiscales.
Por su parte, el oficialismo solía reunir 7 votos en el Consejo de 13 integrantes. A esa mayoría se descuenta que se sumará Martín Doñate –ingresa luego de la partición del bloque del FdT- y en el Gobierno esperan que también se acoplen dos representantes recientemente electas. Este bloque estará integrado por:

Gerónimo Ustarroz, representante del Poder Ejecutivo en el Consejo.

El senador Mariano Recalde. En la división del FdT quedó dentro del bloque Frente Nacional y Popular.

La senadora nacional por el Chaco, María Inés Piltatti Vergara, quien también quedó dentro del Frente Nacional y Popular que conduce José Mayans.

La diputada Vanesa Siley (FdT).

El académico Diego Molea.

El juez Alberto Lugones, referente de la lista Celeste, la corriente más cercana al oficialismo dentro de la Asociación de Magistrados.

La diputada peronista Graciela Camaño, cercana a Sergio Massa, quien no siempre vota en sintonía con el Gobierno porque busca diferenciarse pero que en las votaciones más importantes se sumó al bloque oficialista.

María Vázquez, decana de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, quien ingresó por el estamento de los abogados. Juró este miércoles. Es cercana al consejero Diego Molea.

Paloma Tolosa, decana de Derecho de la Universidad Nacional del Sur, fue electa por el estamento de los académicos. Juró este miércoles. También se la vincula a Molea.

El senador Martín Doñate. Fue nombrado este miércoles. Falta su juramento ante la Corte. Su designación es criticada por la oposición.
No obstante, es de esperar que pueda haber reposicionamientos según la votación de que se trate.

Para sesionar, el plenario requerirá de 12 votos para lograr el quórum y de 14 para aprobar ternas, es decir, para seleccionar magistrados, siempre y cuando estén los 20 consejeros presentes. La cifra de 14 varía ya que de acuerdo al reglamento la aprobación de ternas requiere el voto de los dos tercios de los consejeros presentes en el plenario. Si hay menos de 20, la mayoría necesaria se reduce.

Está a la vista que con la actual conformación del nuevo Consejo ninguna fuerza política tendrá mayoría propia. Ni siquiera quórum, algo que ya se preveía, lo que refleja que sin consenso el órgano de selección y sanción de jueces va camino a su paralización, es decir, a mantener el statu quo en tribunales. Al menos, en el corto plazo. En Comodoro Py, por ejemplo, salvo Claudio Bonadío que falleció continúan en sus cargos todos los jueces del Lawfare.

Tras las elecciones de medio término, la paralización del Consejo era uno de los objetivos de la oposición. Hasta la declaración de inconstitucionalidad de la integración de 13 miembros que hizo la Corte, el órgano de selección y sanción de jueces funcionaba con normalidad. El Frente de Todos, incluso, había logrado nombrar a Alejo Ramos Padilla en el estratégico juzgado federal 1 de La Plata y a Roberto Boico en la Cámara Federal porteña. Pero tras el fallo cortesano del 16 de diciembre pasado, en el que se declaró inconstitucional una estructura vigente desde 2006, esa dinámica se congeló.

El momento en que se dio esa paralización no fue azarosa. Fue post derrota de oficialismo en las legislativas y cuando en el Consejo se habían concluido las ternas para ocupar juzgados y tribunales claves, como puestos codiciados de Comodoro Py.

Entre los concursos que estaban para aprobarse en el plenario (el oficialismo estaba a 2 votos de lograrlo) y se trabaron se destacan los que son para ocupar los juzgados 6, 11 y 12 de Comodoro Py, hoy vacantes. Es decir, el 25% de los juzgados de primera instancia de Retiro. El juzgado 11, por ejemplo, es el que ocupaba Claudio Bonadío y hoy subroga otro magistrado impulsor del Lawfare, Julián Ercolini.

También estaban para votarse las ternas para las dos vocalías de la Cámara Federal porteña que hoy ocupan Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi. Esos dos jueces fueron puestos a dedo por Macri en ese cargo y la Corte determinó que sigan allí hasta que se designe a sus reemplazantes por concurso. Como el Consejo no puede cerrar el proceso ambos siguen en funciones y activos, fallando de acuerdo a los intereses de Cambiemos.

En los considerandos de la resolución mediante la cual la Cámara Alta designó este miércoles a Doñate en el Consejo, la presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, sentó su posición sobre el fallo de la Corte que revivió la estructura de 20 miembros y la actitud de la oposición: sostuvo que nombró al senador de Unidad Ciudadana “a fin de evitar nuevos avasallamientos a los poderes y facultades de este H. cuerpo, así como una interpretación antojadiza, inconstitucional y especulativa para una conformación irregular que altere las representaciones en el Consejo de la Magistratura de la Nación”.

La incógnita

El senador Doñate y la diputada Reyes fueron nombrados este miércoles como representantes del Congreso en el nuevo Consejo. En la nota que elevaron a Rosatti informando su designación, desde las presidencias de Diputados y Senadores le reclamaron que les tome juramento a ambos este miércoles para que todos los consejeros jurasen de forma conjunta y simultánea. Es que a las 20 juraron Tolosa, De la Torre, Díaz Cordero y Vázquez. Pero finalmente, ninguno de los dos legisladores llegó a jurar y, por ende, por ahora no pueden asumir funciones.

Desde Cambiemos objetan la candidatura de Doñate porque reclaman ese cargo para sí. Este miércoles, elevaron una nota a Rosattti para pedirle que no le tome juramento. A la par, buscan judicializar su designación. Critican la jugada de CFK de partir el bloque en el Senado para que Doñate quede dentro del grupo que hoy pasó a ser segunda minoría en el Senado. Reclaman ese sillón en el Consejo para el senador cambiemita Luis Juez.

En una maniobra “espejo” -y sorpresiva- , el Presidente del bloque del FdT en Diputados, Germán Martínez, criticó la decisión de nombrar a la diputada Reyes como consejera porque considera que ese cargo le corresponde al FdT. En conferencia de prensa, adelantó: “Voy a analizar de ahora en más con mi equipo jurídico la posibilidad de realizar una impugnación. Y me reservo también la posibilidad de que, si los hechos lo ameritan, poder hacer la denuncia en sede judicial”.

Ante la posible judicialización de estas designaciones, ¿qué hará la Corte? Una breve acordada que firmaron este miércoles adelanta que la Corte toma juramento a los consejeros designados «sin perjuicio» de lo que pudiera suceder con las denuncias en curso.

Por: FRANCO MIZRAHI

Fuente
eldestape

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