Los intendentes de Cambiemos tienen más obras que los del PJ y los del Frente Renovador sumados
El reparto de obras que incluye el Gobierno provincial en el proyecto de Ley de Presupuesto para 2019 tiene varias aristas polémicas. Pero ni el fuerte endeudamiento, ni la baja inversión en áreas clave como Ciencia o Salud parecen calar tan hondo en la oposición más que el arbitrario reparto de fondos para obras en los municipios.
Es que, esta vez, parece, las cosas fueron un poco lejos. El análisis de los números incluidos en el proyecto que ya está en manos de los Legisladores revela que los municipios de Cambiemos tienen más obras que los del Frente Renovador y que los del PJ sumados.
Son, en total, unos 8.300 millones de pesos destinados a los distritos de signo oficialista -a razón de 1.172 pesos por habitante-, contra 5.200 millones para los del PJ -571 pesos por ciudadano- y 454 millones para los del Frente Renovador –que promedia 495 pesos por habitante.
Los casos que inclinan la balanza son, como es habitual, La Plata y Luján, que suman más de 3 mil millones de pesos, a razón de 3.170 y 7.383 pesos por habitante respectivamente. Son, claramente, los ganadores.
Del otro lado aparecen Tigre, con 4 pesos por cada uno de sus 447 mil habitantes; Laprida, con 4.63, y San Vicente, con 6.56 pesos por vecino. Entre los “grandes” del Conurbano, también rankea bajo Malvinas Argentinas, con 14 pesos por habitante; Berazategui, con 22; José C. Paz, con 29. San Isidro, con casi 60, es el peor ubicado dentro de los oficialistas.
El colmo, como ya reseñó este portal, son los municipios de Saladillo, Suipacha (ambos de signo oficialista) y Presidente Perón, Tres Lomas, San Antonio de Areco y Saavedra (gobernados por el peronismo), que tienen cero pesos en obras asignados.
No se trata de un análisis aislado. Ya en 2017 un análisis de Chequeado.com mostraba que los municipios de Cambiemos recibía dos mil pesos per cápita mientras que los del Frente Renovador promediaban 1.681 y los del PJ 983. Claro que las cifras eran más parejas entonces.
Ese reparto de fondos generó roces con la oposición. Rubén Eslaiman, presidente del bloque massista en Diputados denunció que el Gobierno usó “la misma práctica que el kirchnerismo” para repartir obras. Es decir, la famosa lógica de “amigo/ enemigo”. “Es notorio como priorizaron municipios de Cambiemos del mismo color político, y discriminan a ciudades en las que no gobiernan como es Tigre”, se quejó el Legislador.
El contexto es por demás sensible por una sumatoria de factores: los municipios deberán afrontar el ajuste que llega desde Provincia, por imposición del gobierno nacional, a partir del acuerdo con el FMI. Esto significa menos recursos por vía del fondo sojero, subsidios a la energía y al transporte y limitaciones en la aplicación del fondo educativo. Pero que contiene, además, el condimento de ser un año electoral, que, parece, tendrá la particularidad de no traer obras.
Fuente: Infocielo