Aceiteros paralizan el principal complejo cerealero de Cargill

«Desde la hora 0 del viernes iniciamos un plan de lucha por tiempo indeterminado en las plantas de Rosario y Bahía Blanca», declaró el secretario general del gremio cerealero de Rosario, Adrián Dávalos, que auguró «un conflicto extenso» con la empresa Cargill.

«No podemos permitir que una de las firmas que más factura en la Argentina eche trabajadores sin tener problemas económicos de ningún tipo», anticipó el sindicalista en referencia a los 41 telegramas de despidos que la empresa multinacional giró apenas empezó el año en tres de sus cuatro plantas.

Con dos conciliaciones obligatorias vencidas, una dictada por el Ministerio de Trabajo de la Nación y una previa de la cartera laboral santafesina, los trabajadores denuncian que detrás de los despidos hay una intención de Cargill de flexibilizar las condiciones de trabajo y debilitar a la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso y Desmotadores.

«La empresa argumenta que su intención es cambiarle el perfil a la producción, pero apunta a tener un tipo de trabajador polifuncional, que pueda hacer cualquier tarea dentro de la planta, lo que atenta contra la especialización de nuestro trabajo y, sobre todo, desvirtúa nuestro convenio», denunció Marcos Pozzi, delegado de la planta de Gálvez y miembro de la comisión directiva aceitera de Rosario.

«Pensamos que es un ataque que no está disociado del ataque general a los sindicatos y los intentos de modificar convenios; si los despidos pasan, después la empresa va a ir por más», aseguró el sindicalista, que consideró que «lo que hay detrás es un intento de adoctrinamiento porque somos un sindicato combativo, algo similar a lo que pasa contra la Bancaria».

Fuente. LetraP

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *