Carrió convocó a la Comisión de Relaciones Exteriores y va contra Malcorra
El acuerdo que Susana Malcorra suscribió con el vicecanciller británico Alan Duncan en materia de explotación pesquera e hidrocarburífera en Islas Malvinas amenaza con generarle una dura tormenta al Gobierno y la principal encargada de provocarla será nada menos que Elisa Carrió. Furiosa por la declaración firmada por la canciller, la líder de la Coalición Cívica convocó a una reunión de la Comisión de Relaciones Exteriores para debatir el tema, de acuerdo a lo solicitado por el vicepresidente del cuerpo, el kirchnerista Guillermo Carmona. El temario incluye el repudio a declaraciones de Malcorra, la reafirmación de la soberanía argentina sobre las islas y un proyecto de la propia Carrió que reafirma que el tema debe pasar por el Congreso.
El domingo, la Coalición Cívica- ARI, que lidera Carrió, había expresado su “preocupación” por el acuerdo firmado por el Gobierno con Gran Bretaña la semana pasada y había reclamado que fuera tratado en el Congreso. En el comunicado oficial del partido, advertía que lo suscripto resultaba lesivo para la soberanía argentina y vulneraba la Constitución Nacional. El lunes, desde Nueva York, la canciller respondió que la declaración no se había leído “en toda su magnitud” aunque aseguró que concurrirá al Congreso a dar explicaciones. Pocas horas después, Lilita decidió convocar a la Comisión.
El temario de la reunión, que se realizará próximo miércoles 21 al mediodía, de acuerdo a lo requerido por Carmona, vicepresidente de la Comisión y diputado del Frente para la Victoria, incluirá un proyecto de Nilda Garré y Carolina Gaillard (FPV) para expresar su repudio por la resolución del gobierno de Gran Bretaña de incrementar sustancialmente el gasto militar en las Islas Malvinas, una iniciativa de Carmona que pide reafirmar la soberanía argentina sobre las islas y un proyecto de varios diputados kirchneristas para expresar el repudio a las declaraciones de Malcorra al diario inglés Financial Times en relación al reclamo de soberanía.
También se discutirá una iniciativa que propone declarar “el rol insoslayable” del Congreso de la Nación en la adopción de medidas de política exterior, “puntualmente en materia de pesca, hidrocarburos, navegación y aquellas que afecten lo dispuesto” en la Constitución Nacional “que dispone la reafirmación permanente de la legítima e imprescriptible soberanía” de la Argentina sobre Malvinas. El proyecto fue presentado el lunes por la propia líder de la Coalición Cívica, que a principios de septiembre ya había apoyado una iniciativa del kirchnerismo para que los aviones de Aerolíneas Argentinas lleven la leyenda “las Islas Malvinas son argentinas”.
Pero Carrió no fue la única dirigente dentro del oficialismo que reaccionó de manera negativa a lo firmado por la canciller. Con mucho malestar – aunque con más moderación pública– el radicalismo le extendió una invitación a Malcorra para que la semana que viene concurra al Congreso a una reunión de interbloque a explicar el convenio anunciado.
En la UCR sostienen que, tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea – Brexit- los británicos quedaron una situación de debilidad que la Argentina debería haber aprovechado para reafirmar su reclamo sobre Malvinas. La reunión, impulsada por el jefe de bloque, Mario Negri, y Ricardo Alfonsín, secretario de la Comisión de Relaciones Exteriores, iba a ser a puertas cerradas, para no exponer a Malcorra directamente ante la oposición, que reclama su presencia, sus inmediatas explicaciones y hasta su renuncia.
“Por un lado, lo acordado es claramente contrario al interés nacional y a la reivindicación de la soberanía argentina sobre Malvinas. Por otra parte, es inadmisible que Argentina se comprometa a remover obstáculos para que los británicos exploten los recursos naturales de las islas”, explicó Carmona.
El vicepresidente de la Comisión de Relaciones Exteriores advirtió, además, sobre la forma en la que se materializó el acuerdo. “Que hayan hecho una declaración conjunta que no remite a acuerdos específicos me hace sospechar que es una maniobra para evitar la intervención del Congreso, que debería ratificarlos”, dijo el diputado del FPV.
Por último, Carmona afirmó que el presidente Mauricio Macri debe “dejar sin efecto el apoyo a la candidatura de Malcorra como secretaria general de Naciones Unidas”, ya que hay “un evidente conflicto de intereses”, toda vez que Gran Bretaña es uno de los países con derecho a veto en el Consejo de Seguridad de la ONU.
En tanto, el Frente Renovador también adelantó su oposición a los acuerdos. Desde Nueva York, donde viajó como del massismo a la asamblea de Naciones Unidas, el diputado Alejandro Grandinetti dijo que “el Presidente debe dejar clara” la reivindicación de la soberanía argentina sobre Malvinas para “reparar el principio de daño” del acuerdo firmado.
“Nuestros héroes en Malvinas dieron testimonio hasta con vidas de la soberanía argentina, para que el gobierno de Macri tenga ahora una posición livianita o de doble discurso de la soberanía argentina”, criticó Grandinetti.
OPOSICIÓN EN EL SENADO
En tanto, en la Cámara alta, los senadores nacionales del PJ-Frente para la Victoria Juan Manuel Abal Medina y Ruperto Godoy presentaron un proyecto de declaración en el que expresan su “preocupación y rechazo al comunicado conjunto firmado” entre Malcorra y Duncan.
“La noticia de la declaración conjunta que firmaron Argentina y Gran Bretaña es muy preocupante porque puede implicar un retroceso de nuestra soberanía sobre las Islas Malvinas. Es necesario que Malcorra explique en profundidad lo que significa cada uno de los puntos del compromiso que asumió”, manifestó Abal Medina.
Fuente: Letra P