En su segunda declaración testimonial, Dahiana Gisela Madrid ratificó que aquella mañana nunca había ingresado a la habitación de Maradona para “dejarlo dormir” y que recién lo hizo al mediodía. Para la empresa “Medidom”, donde ella integra el staff de enfermeros, le hicieron escribir un reporte en el que consta que lo había intentado controlar.