“La imagen de las universidades públicas era 90% a favor y 10% en contra. Ahora es 50% a 40%”. Más allá de un nuevo error matemático del autopostulado «mejor economista, con o sin dinero», los particulares números expuestos por el presidente Javier Milei, dan cuenta de que el ataque oficial a las universidades dista cada vez más de ser presupuestario, y pasa a ser exclusivamente ideológico. Para justificar el ajuste, La Libertad Avanza apela a datos ampliamente refutados, desde las supuesta falta de auditorías, hasta el origen socioeconómico de la mayoría de los estudiantes. Mientras, la comunidad educativa universitaria arrancó un nuevo paro de 48 horas este lunes.
Para dar un manto de veracidad, docentes y estudiantes de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) elaboraron trece preguntas y respuestas acerca del conflicto, desde cuánto cobran los docentes y la situación del financiamiento, hasta saber si es cierto que en las universidades públicas sólo estudian los hijos de los ricos.
- ¿Cuál es el principal reclamo de la comunidad universitaria?
El presupuesto universitario anual ejecutado en 2024 será 30% inferior al de 2023 en términos reales (ajustado por inflación). El proyecto de presupuesto 2025 es 40% inferior al de 2023. Inevitablemente, las actividades de enseñanza, investigación y extensión se verán afectadas, reducidas o eliminadas, comprometiendo la calidad educativa. - ¿Es cierto que un profesor titular exclusivo gana 1,7 millones de pesos por mes?
Un profesor titular con más de 20 años de antigüedad, con dedicación exclusiva, cobra 1,7 millones de pesos por mes. Sin embargo, esto representa solo el 1% de la planta docente. Más de la mitad de los docentes universitarios, los jefes de trabajos prácticos, son profesores auxiliares A o asistentes con dedicación simple (10 horas semanales), y ganan entre 145 mil y 175 mil pesos por mes (equivalente a 600 mil pesos por 40 horas semanales). Medidos en dólares, hoy los salarios de estos profesores argentinos con antigüedad y dedicación exclusiva son los menores de sudamérica, menores a los de Bolivia, Perú, Paraguay y Ecuador, entre otros. - ¿Es verdad que las universidades se oponen a las auditorías?
Las universidades no pueden oponerse a las auditorías, de hecho ya son auditadas por la Auditoría General de la Nación (AGN). La comunidad universitaria está de acuerdo con mayor transparencia y auditorías más frecuentes. De hecho, la UNC, junto a las universidades de Jujuy, Formosa y la Facultad de Medicina de la UBA están siendo auditadas por la AGN este año (2024).
- Si el gobierno ya aumentó el presupuesto luego de la primera marcha federal, ¿por qué se sigue reclamando?
Lo que aumentó luego de la primera marcha federal educativa fue sólo el presupuesto de funcionamiento, que representa menos del 10% del presupuesto total. - ¿Por qué protestamos si no hay ningún impacto real en el funcionamiento de la Facultad hoy por hoy?
Hay un impacto real, aunque algunos quizás no lo noten. Las gestiones, los nodocentes y los docentes hacen a diario un enorme esfuerzo para intentar minimizar el impacto de la crisis en los estudiantes, mientras a muchos les cuesta llegar a fin de mes. Sin embargo, la calidad de la educación recibida inevitablemente va a seguir disminuyendo mientras continúe el desfinanciamiento. La situación actual ha llevado a docentes e investigadores/as a renunciar y buscar acceder a cargos en otras instituciones donde la paga es mayor. - ¿Es cierto que en las universidades públicas sólo estudian los hijos de los ricos?
Según datos oficiales, se estima que en 2024 entre 42%y 48% del estudiantado de las universidades públicas está por debajo de la línea de pobreza. Adicionalmente, es clave señalar que lejos de mejorar la inclusión de estudiantes de sectores populares en las Universidades públicas nacionales, la crisis presupuestaria universitaria, y el desfinanciamiento puntual de becas PROGRESAR y becas al estímulo de las vocaciones científicas CIN, obviamente la empeora. - ¿El derecho a protesta de docentes choca con el derecho del estudiantado a tener clases?
Toda medida de fuerza implica poner en tensión los derechos de unos y otros. El objetivo de sostener salarios dignos para quienes enseñan, es defender la continuidad de la universidad pública, gratuita, inclusiva y de calidad. Cabe aclarar que gran parte de las medidas, y en particular las tomas de las distintas facultades, se están realizando sin perjuicio del dictado de clases. - ¿Es cierto que las universidades inventan estudiantes para inflar el presupuesto?
El presupuesto asignado a las universidades NO depende del número de estudiantes. Además, quien contabiliza el número de estudiantes es la propia secretaría de educación de la Nación, no las universidades. - ¿Es verdad que la universidad no permite la movilidad/ascenso social?
Para quienes se egresan de la universidad, los ingresos laborales son aproximadamente el doble y el desempleo es aproximadamente la mitad que para el resto de la población. Adicionalmente, también los estudiantes universitarios con estudios incompletos tienen un mejor salario promedio que quienes terminaron el secundario pero nunca fueron a la universidad. - ¿Es cierto que no hay plata para financiar las universidades públicas?
El presupuesto 2025 prevé un aumento del 37% de la recaudación, pero sin embargo recorta el presupuesto universitario un 10% respecto a 2024, y un 40% respecto a 2023. Adicionalmente, cualquiera de las siguientes opciones alcanzaría para financiar la ley de financiamiento universitario que ya fue vetada por el presidente:
● Revertir la disminución del impuesto a bienes personales (que paga el 1% más rico)
● Eliminar la exención de pago de impuesto a las ganancias del poder judicial
● Eliminar el régimen de promoción de Tierra del Fuego + subsidios a empresas de la
economía del conocimiento
● Eliminar excepción de honorarios de CEOs + régimen de promoción minera - ¿Hay pocos egresados de las universidades públicas respecto al número de estudiantes?
La tasa de egreso no es un índice directamente equivalente a la calidad educativa. Si bien se implementan diferentes dispositivos y políticas a fin de elevarla, y viene aumentando en las últimas décadas, claramente desfinanciar el sistema educativo o cerrar las Universidades no es resolver el problema sino evadirlo. Las políticas públicas que permiten la permanencia, el avance y el egreso como las becas Progresar, también han sido desfinanciadas por este gobierno.
El paso por la universidad pública transforma, aunque el resultado final no sea finalizar una carrera. Además, las universidades no son meras fábricas de egresados, en ellas se produce la mayoría de la ciencia, extensión y transferencia tecnológica que se hace en el país. - ¿Es verdad que las protestas universitarias son contra el gobierno, porque los salarios ya eran malos de antes?
Los salarios eran bajos en 2023, pero venían aumentando desde 2020, y en 2024 han caído un 30% en términos reales (ajustado por inflación) contra 2023. El presupuesto universitario también fue en aumento entre 2020 y 2023, en 2024 el gobierno lo recortó en un 30%, y el presupuesto 2025, por estudiante, sería el menor de los últimos 20 años. El reclamo no es en contra del gobierno, es en defensa del sistema universitario argentino. Es justamente el gobierno el que elige transformar este reclamo universitario en una batalla contra las universidades, al negarse a cualquier posibilidad de solución del recorte presupuestario. - ¿Por qué tanto lío si el presidente ya dijo que la universidad va a seguir siendo pública y no arancelada?
En lugar de privatizarlas o arancelar de golpe, el gobierno propone políticas que llevan a la lenta pero segura destrucción de las universidades públicas. No sólo desfinancia a las universidades y pulveriza los salarios, sino que también ataca de manera constante a las universidades en sus declaraciones a los medios. Ya hace 5 años que las universidades y los trabajadores universitarios hacemos un esfuerzo enorme por sostener la calidad educativa con el creciente número de estudiantes, pero en estas condiciones se hace imposible, y muchos docentes están eligiendo renunciar a sus cargos, problema que además se va a profundizar en los próximos años a menos que haya una importante y urgente recomposición salarial y presupuestaria.
Rebatir prejuicios
Quien también salió en las últimas horas a ofrecer información pública fue la Universidad de General Sarmiento (UNGS). La publicaron «para rebatir algunos de los prejuicios sobre las universidades públicas que están circulando en el último tiempo», según afirmaron.
En particular, apuntaron a «la mentira de que ‘la Universidad Pública Nacional hoy no le sirve a nadie más que a los hijos de los ricos y a los de la clase media alta’”.
Con base en el Censo Estudiantil 2023 y los relevamientos de graduadas y graduados 2020, 2021, 2022 y 2023, la Secretaría de Planeamiento y Desarrollo Universitario de la UNGS concluyó una serie de postulados para discernir quiénes estudian en la Universidad Nacional de General Sarmiento:
-8 de cada 10 estudiantes son primera generación de universitarios en su familia
-8 de cada 10 graduades son primera generación de universitarios en su familia
-58% de les estudiantes residen en Malvinas Argentinas (25%), San Miguel (20%) o José C. Paz (13%)
-82% de les estudiantes trabajan (58%) o buscan trabajo (24%)
-48% de les estudiantes que trabajan lo hacen más de 35 horas semanales
-28% de les estudiantes son principal sostén del hogar
-55% de les estudiantes tienen su propio trabajo como fuente de financiamiento para los gastos de estudio
-89% de les graduades de la UNGS trabajaron durante su carrera
-Solo 1 de cada 10 graduades de la UNGS dedicó tiempo completo al estudio
-23% de les estudiantes accedieron a una o más becas de estudio de la UNGS
-50% de les graduades accedieron a una o más becas de estudio de la UNGS Fuente: Censo de estudiantes UNGS 2023 y Monitoreo de Graduadxs UNGS 2020/21/22/23.
El viernes, el Consejo Superior de la UNGS declaró el «estado de alerta permanente en el ámbito de la UNGS» y convocó a la comunidad universitaria a «coordinar esfuerzos de visibilización y movilización por la defensa de la educación superior».
Números a favor de las universidades
En las últimas horas se conocieron otros datos relacionados a las universidades: Zuban Córdoba realizó una encuesta para conocer qué opina la población acerca de la problemática.
El 86,4% coincidió con la frase «las universidades públicas son un orgullo para Argentina».
El 91,3% rechaza la afirmación: «las universidades públicas son un gasto innecesario».
Y el 76,2% no acuerda con que «los pobres no llegan a la universidad pública».
Mientras tanto, el gobierno sigue en su cruzada contra la universidad pública y la ciencia nacional. El futuro (y la lucha) dirán cómo terminará este conflicto.
Por: Gustavo Sarmiento