Barajar y dar de nuevo

En cuestión de minutos el escenario de victoria se convirtió en derrota en la provincia de Buenos Aires. Las discusiones internas. La autocrítica de Axel Kicillof. El reencuentro de una agenda oficial haciendo foco en los intendentes.

El domingo 12 de septiembre a las 19.30 horas todo era festejo en el gabinete bonaerense. Axel Kicillof, Máximo Kirchner, Victoria Tolosa Paz y Daniel Gollan se sumaron a las felicitaciones por hacer creído ganar una elección que nunca fue tal. Y así fue como todos los dirigentes mencionados caminaron las 5 cuadras que separan Casa de Gobierno con la “Casa de Axel”, en 9 y 51, en donde los esperaba una calle cortada, militantes esperando un mensaje y hasta un escenario en el que tocó una banda local.

Pero la espuma con sabor a victoria duró poco. Luego de haber pasado por dicho espacio, el Gobernador, su gabinete, el presidente del bloque de la cámara de diputados del Frente de Todos, y los flamantes candidatos, se anoticiaron con la realidad de las urnas. Mientras los autos oficiales transitaban la autopista La Plata – Buenos Aires camino al bunker de Chacarita, los llamados desde el ministerio de Interior alertaron que tanto las mesas testigo como las primeras cargas de los telegramas oficiales daban al Frente de Todos perdedor. Del festejo al shock. El resto es historia conocida.

El lunes 13 de septiembre no hubo agenda oficial. El resultado de las PASO pasó factura y fue inevitable – y lógico – repasar y repensar todos y cada uno de los errores cometidos. Autocrítica y análisis. Los resultados obtenidos en cada uno de los 135 distritos fueron estudiados y pasaron por varios tamices. Por la tarde, Axel Kicillof convocó a gran parte de su gabinete y mantuvieron un encuentro que duró varias horas.

Las discusiones que ocurrieron en ese despacho no trascendieron en los medios. “Los trapitos se lavan adentro”, dijeron desde el entorno del mandatario. Cierto es que, como la reunión duró más de lo esperado, el martes a la mañana se canceló lo que podría haber sido la primera aparición pública de Kicillof en la habitual conferencia sobre la situación epidemiológica bonaerense.

El martes, además de no haberse realizado la conferencia, tampoco hubo agenda oficial. El hermetismo continuaba en casa de Gobierno y recién alrededor de las 17 horas el Gobernador, tras varias reuniones, dio la primera entrevista oficial la agencia Télam. Los 25 minutos de nota fueron una profunda autocrítica de Axel Kicillof.

Sobre el resultado de las PASO dijo que “hubo un mensaje claro, el tema es cómo se decodifica”. “Para alcanzar la recuperación y compensar las pérdidas de la pandemia, hay que relajar la mirada fiscalista. Tanto el gobierno nacional y provincial deben dedicarse en este momento a la reconstrucción de manera excluyente; eso implica que el salario le gane a la inflación y que se cree trabajo”, enfatizó.

El miércoles a media mañana, la ministra de Gobierno y alfil de la vicepresidenta, Teresa García, sorprendió a propios y extraños y anunció que todos los ministros y ministras bonaerenses habían puesto a disposición de Axel Kicillof su renuncia. “Las y los ministros del gabinete saben que ninguno es imprescindible y que de considerarlo necesario, se harán los cambios consecuentes. Nadie está atornillado o encaprichado con quedarse en un lugar o con un nombre propio”, afirmó la ministra de comunicación, Jesica Rey. El desenlace replicó en Casa Rosada.

Al mediodía Kicillof tuvo su primera participación fuera de La Plata y estuvo en el Museo del Bicentenario, en la presentación del proyecto de Ley de Promoción de Inversiones Hidrocarburíferas. El ministro de Economía, Martín Guzmán, fue uno de los oradores del encuentro y elogió distintas políticas implementadas por el Gobernador cuando ejerció su rol.

Por la tarde, el mandatario retomó su agenda y se reunió con los intendentes del conurbano bonaerense. La tercera sección electoral fue la única de las ocho que ganó el Frente de Todos aunque también fue la elección que menos puntos sacó. El oficialismo consiguió el 42,7% de los votos, mientras que en las generales de 2019 rozó los 60 puntos: 59,6%.

En la reunión se analizó el magro resultado obtenido y también se hizo foco en cómo revertir el resultado de cara a las generales de noviembre. Uno de los ejes se centró en ir a buscar casa por casa a los cientos de miles de votantes desencantados con el oficialismo que no fueron a votar el domingo pasado.

En el conurbano el porcentaje de votantes fue uno de los más bajos: 64,8%. En números hubo 2.798.391 votos en 2021 y en las PASO de 2019 los sufragios fueron 3.564.478; la diferencia es nada ni nada menos que 7.66.087 el doble de votos que hay de diferencia en toda la provincia entre el oficialismo y la oposición.

El jueves a las 16:30 el mandatario tuvo un segundo encuentro con los intendentes de una sección clave a recuperar en la provincia de Buenos Aires como es la primera sección electoral, espacio en donde oficialismo perdió por un poco más de cuatro puntos: 35,6% a 39,9%. Es uno de los lugares clave para el gobierno ya que están en disputa 8 bancas para el Senado bonaerense.

El gobernador estuvo tres horas reunido con los jefes comunales y parte de su gabinete en el Salón Dorado. Según detalló a El Destape uno de los ministros que participó del encuentro, “no se hizo foco en un análisis de las elecciones, sino más bien en la gestión”. “No es que no se habló del resultado del domingo”, dijo y aclaró que por esas horas, al existir un conflicto en Casa Rosada, “se hizo foco en la gestión”. Por otra parte advirtió que “no hubo reclamos de los intendentes” en términos políticos.

Finalmente el viernes por la mañana Axel Kicillof hizo su primera aparición pública tras la derrota de las PASO. Desde Florencio Varela y en la Universidad Nacional “Arturo Jauretche” realizó dos anuncios relacionados a la campaña de vacunación. Atípico en él, habló menos de 10 minutos y sólo se centró en los anuncios del Plan.

Pasadas las 16 horas el mandatario recibió en el Salón Dorado de Casa de Gobierno a los intendentes del Frente de Todos del interior bonaerense. Participaron jefes comunales de la segunda, cuarta, quinta, sexta y séptima sección electoral. La reunión fue similar a las anteriores: análisis de obras, del plan de vacunación y una leve catarsis post electoral.

El Gobernador cerró una semana crítica manteniendo el diálogo con los jefes y jefas de cada distrito. Logró sostener a su gabinete y no habrá cambios por el momento. Ahora, el objetivo es reencontrarse con el electorado que le dio la espalda el domingo pasado y demostrarle que la demandas fueron escuchadas.

Un detalle no menor: el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, llevó el Clio con el que se hizo la campaña en 2019 y lo estacionó dentro de Casa de Gobierno. La simbólica imagen tal vez sirva para rememorar cómo fue el camino realizado para llegar al poder bonaerense. Barajar y dar de nuevo.

Por: BELÉN BARTOLI

Fuente
eldestape.com

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