Una familia bahiense necesitó más de $ 47 mil para superar el umbral de pobreza

De acuerdo al CREEBBA, durante el mes de agosto “nuevamente el aumento en alimentos estuvo traccionado por verduras, frutas y harinas y sus derivados. A pesar de la continuidad del esquema de precios máximos que rige sobre la gran mayoría de los bienes de la canasta alimentaria, empiezan a observarse incrementos por encima de los evidenciados hasta el mes pasado, cuando se registraron escasas variaciones”.

Por otra parte, consignan que «el resto de los bienes no alimentarios mostraron una variación un tanto menor a la de los alimentos, explicada principalmente por servicios para el cuidado personal, electrodomésticos, muebles y accesorios y telefonía. Lo expuesto generó un leve descenso de la inversa del coeficiente de Engel, es decir, un crecimiento marginal de la proporción del gasto en alimentos”, detallan.

En cuanto a los componentes de la canasta, «mostraron una variación inferior en relación al IPC por tercera vez en el año. Este comportamiento está probablemente relacionado con cuestiones del mercado cambiario (trabas a las importaciones, mayor tensión en el tipo de cambio nominal, entre otros) y el consecuente ajuste de ciertos bienes que no forman parte de la Canasta” observan.