Una mujer de 30 años murió en Catamarca como consecuencia de una infección generalizada que comenzó cuando intentó abortar introduciéndose una rama de perejil en la vagina, según informaron a este diario voceras de la regional de la Campaña por el Derecho al Aborto. La mujer, que era madre de dos niños, llegó a la Maternidad “25 de mayo” de la capital provincial inconsciente y con una septicemia que había comenzado a más de 400 kilómetros de San Fernando del Valle, en la localidad donde vivía y había recurrido a un aborto clandestino. Antes de ingresar en el hospital donde falleció, había pasado dos días internada en un centro médico del interior de la provincia sin que la septicemia fuera controlada. Fuentes de la Campaña explicaron que la joven, a quien se refieren como “Paulina” para resguardar su identidad, había contado sobre el aborto clandestino a amigas pero no a su familia, que refirió una peritonitis.
El director de la Maternidad donde falleció la mujer, Daniel Ovejero, detalló a una radio local que Paulina “llegó al a maternidad con un cuadro séptico grave y nunca tuvo conciencia”, y que en el centro médico no hubo investigación acerca de las causas de la infección generalizada. “Normalmente, cuando hay este tipo de maniobras ilegales, nunca son declarados por las pacientes. Ellas siempre dicen no haber tenido ese tipo de maniobras y, por la evolución que tuvo, nosotros no podemos aseverar lo que dicen en las redes sociales”, añadió, en referencia la información sobre qué generó la infección que terminó matando a la mujer. “No podemos aseverar que haya sido un aborto clandestino. ¿Lo sospechamos? Sí, lo sospechamos. Pero no podemos tener la seguridad en absoluto de eso”, advirtió.
Paulina vivía en un pueblo de 300 habitantes, distante alrededor de 400 kilómetros de la capital provincial y en el que hay una sala de primeros auxilios precaria. Cuando la infección comenzó a avanzar, la mujer recurrió “a un pequeño hospital en un departamento cercano, donde estuvo internada dos días. Ahí le dan traslado a la Maternidad, pero ya con una septicemia galopante”, detallaron voceras de la Campaña en referencia al centro médico donde finalmente falleció. “En la Maternidad no se hizo nada para investigar los causantes de la muerte”, advirtieron las fuentes.
En Catamarca, la aplicación del Protocolo de interrupción legal del embarazo es incierta. El propio ministro de Salud local, Ramón Figueroa Castellanos, aseguró que la provincia adhirió hace un año. Las voceras de la Campaña aseguraron a este diario que “no se cumple de manera efectiva, no se dio difusión a la firma y tampoco se sabe en qué fecha fue”. Sin embargo, en el Atlas Federal de Legislación Sanitaria de la República Argentina, publicado en internet por la Secretaría de Salud de la Nación, se indica que, en relación a la interrupción legal del embarazo, en Catamarca “no se registran normas”.
Fuente: Página12