El Fondo de Infraestructura Municipal, implementado por la Provincia a partir de las negociaciones con la oposición para lograr la aprobación de la autorización para endeudarse, fue ampliamente celebrado por los intendentes, muchos de los cuales tienen las cuentas al límite después de pagar salarios y servicios.
Por eso llama la atención los modestos números de la ejecución de esos 15.500 millones que, en dos años, la Provincia derramó sobre las 135 comunas para que gestionaran obras. Según reconstruyó INFOCIELO a partir de datos oficiales, apenas una de cada tres se terminó.
Los fríos números dicen que las comunas proyectaron con esa bolsa de 15.500 millones unas 1.744 obras en todo el territorio. De ese total, 550 están finalizadas (el 31 por ciento), otras 747 están en ejecución (el 43 por ciento) y otras 275 están aún en fase de licitación (menos del 16 por ciento).
Los intendentes echaron mano a esos fondos para distintos tipos de trabajos. El saldo debería ser, a estas alturas, 75 centros de salud y hospitales refaccionados y ampliados, la extensión de la red cloacal por el equivalente a 50 kilómetros lineales, la construcción de dos mil cuadras de pavimento y la repavimentación de otras 700.
Además, los intendentes proyectaron la ampliación de 8 parques industriales, el tendido de 22 kilómetros de redes de agua potable y de 3 kilómetros de red de gas, la puesta en valor de 35 plazas y de 40 edificios públicos.
Analizados a la luz de los costos, las obras viales se llevaron más de 6.100 millones de pesos; las de arquitectura, 1.100; las de agua y saneamiento, 416 millones; las hidráulicas, 560 millones; las de energía 101 millones; las de vivienda, 84 millones.
Fuente: Infocielo