Este viernes, los gremios docentes y el ejecutivo volverán a reunirse para intentar destrabar la paritaria del sector que se encuentra en un laberinto con cuatro días seguidos de paro. Pero el encuentro tendrá un nuevo actor: la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), el gremio de empleados públicos con el que más conflictos lidia el Gobierno provincial y que hasta ahora había estado fuera de la mesa de negociación. Un fallo del Juzgado Contencioso 1 de La Plata, ordenó que ATE también forme parte de la paritaria docente. Sucede que hay varios maestros enrolados en la entidad sindical y a los que se les realizan las retenciones sindicales pero no tienen representación en la negociación colectiva. Aparece así un escollo más en la negociación que la gobernadora María Eugenia Vidal y los suyos todavía no puede sortear.
Según explicaron desde ATE el fallo firmado por Luis Arias, “legaliza” una situación que ameritaba una respuesta. La asociación cuenta con una importante cantidad de afiliados docentes en la provincia de Buenos Aires. A ellos se les realizan las retenciones por cuota sindical, pero que no cuentan con la representación correspondiente en la mesa paritaria.
Los docentes que tiene representación gremial son los trabajadores de la educación enrolados en SUTEBA, FEB, UDOCBA, SADOP, AMET y UDA. Ahora también se sumará ATE.
La negociación entre los gremios y el Ejecutivo está estancada. El primer ofrecimiento de un aumento salarial del 18 por ciento en cuatro tramos de 4,5 fue rechazado de plano. La provincia le agregó la cláusula gatillo medida por la inflación. Es decir que si la inflación supera el 18%, los sueldos aumentan y tampoco hubo acuerdo. Los gremios quieren discutir antes la pérdida del poder adquisitivo. Vidal decía que con el ofrecimiento –el mejor que podían hacer- el docente no perdía: o le ganaba o le empataba a la inflación.
En el último encuentro, el pasado viernes 3, el gobierno había presentado a los gremios una propuesta que establecía un aumento salarial atado al índice de inflación oficial, y con un delante de sueldo que fluctuaba entre los 800 y los 2.000 pesos de acuerdo al cargo. También se rechazó porque esa oferta era “en negro”.
Tras las idas y vueltas se desató una guerra abierta entre Vidal y los gremios. La gobernadora lanzó dos cartas abiertas en su facebook dirigidas a la comunidad docente. En una detallaba lo ofrecido, pedía pensar en los chicos y correr de la discusión «cualquier interés político», en un claro mensaje al titular de SUTEBA, Roberto Baradel. La mandataria hizo correr el escrito luego de fracasar en la negociación. Al mismo tiempo, el ministro de Educación bonaerense Alejandro Finocchiaro, aconsejaba a los docentes que «no se dejen usar», por los gremios. Tres días después la gobernadora volvió a publicar en su facebook otra carta. En el último texto agradecía a los docentes que no habían adherido al paro, una medida llevada a cabo en el primer día de clases.
La llegada de ATE a esa mesa de discusión le complica aún más la táctica de negociación al ejecutivo. El titular de ATE y de la CTA Autónoma de la provincia de Buenos Aires, Oscar de Isasi ya advirtió que se suma a la paritaria “con una voluntad de unidad con todas las organizaciones sindicales docentes que pelean por salarios dignos” y que “la clave está en la unidad para derrotar el ajuste”.
Este viernes, según le deslizaron a Letra P desde el Ejecutivo, la oferta será “superadora de la última presentada y teniendo en cuenta las objeciones planteadas”.
El encuentro está pautado para este viernes 10 de marzo a las 15. Habrá en la mesa, del lado de los gremios, un lugar más: el de ATE.
Fuente: Letra P