El índice mostró, a nivel general, un importante aumento de 63,6% en relación al bimestre pasado (III 2016), ubicándose en los 54,8 puntos. Este significativo crecimiento quebró la tendencia negativa que se venía observando y podría indicar, de repetirse en los meses próximos, el inicio de un período de recuperación.
Otro dato positivo es que, con respecto al mismo bimestre del año anterior (IV 2015), el indicador expuso un leve incremento del 5,6%, aunque es preciso mencionar que desde el inicio de las mediciones hasta el periodo actual totalizó una disminución del 45,2% en la demanda laboral de la ciudad.
En lo relativo a la evolución por rubros, las categorías que obtuvieron mayores incrementos respecto al bimestre anterior fueron, principalmente, Servicios Industriales y Agroindustria, las cuales en los últimos períodos venían en retroceso. Con respecto a las contracciones, las únicas categorías que sufrieron descensos en comparación al período anterior han sido Otros rubros industriales y Construcción.
En cuanto a la continuidad, se mantiene el predominio de los pedidos de trabajadores eventuales por encima de los permanentes. Mientras que los valores respecto a la subcategoría permanentes no oscilaron significativamente, sí lo hicieron aquellos referidos a los pedidos de trabajadores eventuales, cuyo número se incrementó casi el doble.
Por otra parte, la demanda según la función, volvieron a prevalecer los requerimientos de puestos técnicos con una importante recuperación en su nivel, mientras que la demanda para puestos administrativos y de ventas, y gerenciales decayeron en magnitudes significativas. Respecto a los pedidos según la calificación, se consolida el predominio en la búsqueda de trabajadores no calificados por sobre trabajadores calificados, ocurriendo un aumento importante en la primera de esas subcategorías y quedando la segunda casi inmovilizada.
Como conclusiones, el significativo aumento del Indice de Demanda Laboral Industrial podría estar reflejando el fin del período de incertidumbre iniciado con el nuevo cambio de gobierno y continuado con sus primeras medidas económicas. A su vez indicaría, de consolidarse la tendencia creciente, un repunte en la actividad económica de las empresas industriales locales.
Sin embargo, también es posible que evidencie la demanda contenida durante un período de tiempo prolongado, producto de la incertidumbre y la disminución en el nivel de actividad. Además, al mantenerse en niveles bajos, cualquier incremento refleja un salto porcentual importante. Por eso generalmente luce apresurado obtener conclusiones con un solo período de cambio de tendencia.
Finalmente, como siempre se explica, este indicador no contempla todas las vías de solicitudes de empleo por parte de las empresas, sino las más importantes y significativas en el sector industrial. Esta amplia representatividad indicaría entonces, de mantenerse la tendencia creciente, que la potencia de creación de puestos de trabajo por parte de sector privado se está reactivando, lo cual cobra importancia en un contexto en el que el sector público ya no actúa como sostén de la demanda de trabajo cuando no lo hace el privado.
Fuente: Centro de Estudios Económicos UIBB