En Progresistas sienten que esa alianza creada para competir en las elecciones del año pasado se encamina a su disolución. Y todas las miradas apuntan a la diputada Margarita Stolbizer, quien ya no esconde su alejamiento de esa construcción de centroizquierda para profundizar su relación con el derechista Sergio Massa, con quien planea unirse en la provincia de Buenos Aires para las legislativas de 2017. Sistemática perdedora de elecciones a cargos ejecutivos (en 2015, apenas rozó el 2,5% de los votos en la carrera por la Presidencia), busca una banca en el Senado de la Nación que le permita estirar cuatro años su estancia en el Congreso.
Stolbizer estuvo este lunes con Massa en Mar del Plata. Bajo la consigna «Cómo construir una Argentina para todos. Análisis sobre la situación económica, laboral, y social», los dos brindaron una conferencia en la que prácticamente blanquearon el lanzamiento de una campaña en tándem. “En los próximos meses nos van a encontrar arremangados, trabajando para darles un mejor país a todos los argentinos”, anunció la líder de GEN.
Pero, a diferencia de otros coqueteos, esta vez irán a fondo. A la presentación en Mar del Plata le sumarán un viaje a Bariloche, a donde llegarán en plena temporada invernal. Y, según afirman en el massismo, ya preparan una extensa gira por varios distritos bonaerenses que iniciarían en agosto. Si eso se concreta, será difícil para Stolbizer dar marcha atrás y reconstruir lo que, paso a paso, va dinamitando.
Ni el socialismo ni Libres del Sur saldrán con los tapones de punta contra Stolbizer, una de las dirigentes más cuidadas por los medios de comunicación, a los que les resulta funcional por su rol de denunciadora, sólo comparable –y ahora otra vez en tensión- con Elisa Carrió. Pero en ambos espacios ya se gestan resquemores por el abandono de Margarita, a quien respaldaron en la dura campaña presidencial del año pasado.
“Hay que entender que son elecciones por distrito las del año que viene y es normal que cada uno busque su mejor futuro”. Así intentó un compañero de interbloque bajarle el tono al despegue de Stolbizer. “Son armados estrictamente provinciales”, agregó.
Pero donde más sienten el impacto es en Santa Fe. Allí, voceros del gobierno de Miguel Lifschitz admiten que la partida de Margarita “es un golpe duro” para la fuerza que los socialistas buscan impulsar, que crezca como tercera opción detrás del PJ y de Cambiemos. “Pone al partido en una situación muy complicada”, admiten. Incluso reconocen complicaciones locales: “(Mónica) Peralta es la referente de GEN acá y es funcionaria de Rosario”.
Lo que no pueden negar en el socialismo es que Stolbizer está corriendo detrás de su mejor chance. “Electoralmente tiene mejores posibilidades con Massa que con nosotros”, reconocen en Santa Fe, “y tal vez sea la única posibilidad de que GEN pueda tener un cargo”. El año que viene termina el mandato el senador Jaime Linares (GEN), quien en 2011 sorprendió al quedarse con la tercera banca que repartía la provincia de Buenos Aires. Llegó a ese cargo como primer candidato a senador de la entonces alianza Frente Amplio Progresista (FAP), que llevaba como candidato a presidente al líder del socialismo, el diputado Hermes Binner. Linares y Stolbizer son los únicos dirigentes de GEN con cargos a nivel nacional.
Esa silla, la de Linares, es la que quiere revalidar Stolbizer. Pero, a diferencia del plan progresista, busca llegar de la mano de Massa. Para un partido de limitaciones financieras como GEN, tener un senador nacional es algo clave, teniendo en cuenta la cantidad de recursos y contratos que ofrece el privilegio de pertenecer al Senado de la Nación.
Por algo Massa hizo campaña impulsándola como aspirante a la Corte Suprema de Justicia, pese a la ausencia de toda experiencia y pergaminos para tamaña aspiración. Con eso se ganaba su confianza y, de paso, tenía la chance de correr de su camino a una competidora por el mismo objetivo, el Senado. Lo que evalúa el massismo ahora es convencer a Margarita de armar fórmula con Massa e ir como segunda candidata a senadora. Un riesgo demasiado alto, ya que ese hipotético frente debería ganar la provincia para que los dos se mudasen de Cámara en el Congreso.
FUNCIONAL PRO. La bronca que está despertando Stolbizer entre algunos de sus todavía aliados también tiene su repercusión en la Cámara de Diputados. “Fijate a qué votaciones faltó”, sugirió uno de ellos. Margarita no estuvo cuando se aprobó la devolución de una porción del IVA a sectores postergados, ni cuando se trató la ley de acceso a la información pública ni, tal vez lo que más molestó a sus compañeros de bancada, cuando la Cámara baja sancionó la ley antidespidos. En cambio, sí dio el presente en los dos proyectos más importantes para el Poder Ejecutivo: el pago a los fondos buitre y el reciento paquete ómnibus que incluía el blanqueo de capitales, el pago de juicios a jubilados y diversos acuerdos por fondos con las provincias. En ambos lo hizo votando a favor.
Fuente: LetraP