Pese al aumento de casos, provincia no evalúa retroceder de fase

La ministra de Gobierno, Teresa García, reconoció hoy «la angustia y el cansancio» que reina en el Ejecutivo provincial ante la llegada del pico de crecimiento del virus.

En esa dirección, señaló que cada vez se reduce más el tiempo de duplicación: «Estamos en el peor momento y es cuando más cuidadosos hay que ser «, admitió la funcionaria, pese a lo cual, dijo no creer «que tengamos que volver para atrás por ahora».

«Nadie puede garantizar si vamos a volver o no, pero hoy no estamos analizándolo», redundó García, pese a admitir que el sistema de salud tiene «el 50% de las camas hospitalarias ocupadas«.

A la fecha y según datos proporcionados por el Ministerio de Salud bonaerense, la provincia realizó 101.959 testeos, registrando un total de 16.451 casos positivos y 417 fallecidos.

Esa cartera emitió además un comunicado en el que sostuvo «que la velocidad de contagios es muy preocupante» y «las camas se están ocupando a una velocidad no aconsejable, pero al día de hoy la situación está controlada y el índice de ocupación de camas en toda la Provincia es de 47,40% y en los 40 municipios del AMBA es del 54%».

De esa manera, salió a desmentir datos aparecidos «en medios de comunicación y redes sociales» que alertaban que el promedio de ocupación del Conurbano es del 59%, con distritos que llegan a un 95% de ocupación».

Más allá de las cifras alarmantes de la provincia, las declaraciones de García contrastan con las posturas expresadas días atrás por varios funcionarios provinciales, que venían reclamando medidas más drásticas.

Tal vez y dispuesto a no seguir pagando costos políticos ante los reclamos de los grupos anticuarentena y los sectores productivos que empiezan a agotar sus reservas, y frente al hastío que el aislamiento provoca en parte de la población, el mandatario provincial comenzó a darle un giro a la idea de dar un paso atrás en la fase.

Fuente. BAENegocios