La economía moderó su caída en abril gracias al «efecto cosecha»

La actividad económica cayó en abril un 1,3% respecto al mismo mes del año pasado y acumuló un retroceso del 4,6 por ciento en el primer cuatrimestre del año, informó el Indec en su Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE).

Pese a la curva negativa, la economía cayó menos que en marzo, cuando había retrocedido un 6,9%. La moderación se explica por la fuerte alza del sector agropecuario, que trepó un 40,2% en el marco de la cosecha récord. Además el sector compara su actividad contra la base de un 2018 afectado por la sequía. El otro sector dinámico fue el de la pesca, que subió 35%.

Pero el resto son números que siguen en la tónica recesiva. El informe oficial dice que la intermediación financiera terminó con una caída del 13% interanual; que el comercio mayorista y minorista cayó un 11,6; además, la industria retrocedió 8,5 por ciento; el rubro de impuestos netos de subsidios desaceleró un 5,7%; y la electricidad, agua y gas cayeron en promedio un 6,1 por ciento.

También cerraron en negativo en abril la construcción, con una caída del 4,5%; el rubro otras actividades de servicios comunitarios, sociales y personales, -3,4 por ciento; el sector inmobiliario, con una pérdida del 2,5%; y la hotelería (-2,1%), el transporte (-0,8%) y los servicios sociales y de salud (-0,1%).

Otros rubros positivos fueron la minería y la educación con subas limitadas al 1,3% interanual.

El gobierno vio la luz

Tras conocerse los datos del Indec fuentes oficiales destacaron que en abril la actividad “mostró su crecimiento más alto en seis meses”. En realidad las fuentes resaltaron el crecimiento intermensual. Respecto a marzo de este año, la economía apreció un crecimiento del 0,8% sin estacionalidad.

También tomaron en cuenta la caída interanual del 1,3% pero para analizar que hubo “una marcada desaceleración respecto de los meses anteriores”.

En ese contexto hay que destacar que el número de abril se relaciona con el fuerte repunte del sector agropecuario y de la pesca. Pero también cabe decir que la actividad sectorial este año tiene cosecha récord y además compara contra los meses fuertemente negativos de 2018 marcados por la sequía.

A la vez, desde el gobierno destacaron la “recuperación” de la industria y de la construcción, pero el  informe del Indec apunta que en abril esos sectores cayeron 8,5 y 4,5 por ciento respectivamente, dos números todavía fuertemente recesivos.

Sin embargo, desde la administración dijeron que “en abril se retomó la senda de crecimiento que se había iniciado en diciembre pasado, pero que se había visto desviado en marzo por un incremento transitorio en la volatilidad financiera”.

Y sumaron que “las buenas perspectivas climáticas para la presente campaña agrícola (a diferencia de lo ocurrido en 2018), anticipan que la economía tendrá el impulso de una cosecha histórica, que se extenderá hasta julio inclusive”, en una apreciación que parece limitar la perspectiva de crecimiento a la actividad agropecuaria.

Lo que viene

Pocos después de la publicación del EMAE la consultora Orlando J. Ferreres & Asociados (OJF) publicó su informe de mayo con un dato de una suba del 0,3% interanual, un número que abona la tesis de recuperación que plantea el gobierno nacional.

OJF la definió como “una leve suba” de la economía después de trece meses de caída consecutivos traccionada, fundamentalmente, por el sector agropecuario que trepó un 54,5% interanual, acompañado con otros sectores “discretamente positivos”, como la minería que subió 3,3 por ciento y el transporte, que se alzó un 3,1 por ciento, la electricidad (1,4%) y la construcción, que  marcó un 0,8% a favor.

En los números de OJF, los sectores más negativos de mayo fueron la intermediación financiera (-11,2%), la industria (-3,8%) y el comercio (-1,6%).

El informe de OJF destacó en particular a la industria, que si bien volvió a caer lo hizo en  un nivel menor al de meses previos. En esa línea, la fundación FIEL resaltó positivamente que la producción fabril subió un 1,8% en mayo en relación a abril si bien en la comparación interanual todavía aprecia una caída del 6,1%.

Varias consultoras privadas sugieren poner atención a la actividad de la construcción. Un dato del Informe de Coyuntura de la Construcción del IERIC marca que el consumo de cemento subió 4,3% interanual en mayo.

La suba es importante pero el nivel del consumo sigue siendo inferior al de mayo de 2017. En el medio está la devaluación y la conmoción financiera de 2018 que llevaron al gobierno a pedir la ayuda del FMI. Después de ese acuerdo cayó brutalmente la inversión en obra pública y esa rama de la actividad quedó limitada a los proyectos que ya estaban autorizados al momento del estallido de la crisis.

Fuente: tiempoar.com.ar

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