Para el FMI, la dolarización es la mejor salida contra la inflación, pero tiene contraindicaciones

Esta semana se conoció que los Estados Unidos están interesados en una posible dolarización de la economía Argentina. Larry Kudlow, director del Concejo Económico del país del norte, dejó abierta la posibilidad en una entrevista con la cadena de noticias Fox.

En este contexto, el presidente Mauricio Macri espera la definición oficial por parte del Fondo Monetario Internacional para garantizar el programa financiero de cara al 2019, pero, por el momento, las noticias al respecto no son alentadoras.

La posibilidad de dolarización tomó calor en la jornada de ayer, y si bien hubo desmentidas oficiales en “off” a los principales periódicos oficiales, no hubo un comunicado ni de la Casa Rosada ni del Ministerio de Hacienda sobre esta posibilidad. Ese silencio incómodo abrió el debate sobre los beneficios y las contras de que el dólar se transforme en la moneda de curso corriente en el país.

En el año 2000, el Fondo Monetario Internacional publicó un documento llamado “Plena dolarización: Ventajas e inconvenientes”, redactado Andrew Berg, quien ese entonces formaba parte del equipo de estudios del FMI, y Eduardo Borensztein, ex Jefe de la División de Estudios sobre Países en Desarrollo del Departamento de Estudios del FMI.

Allí, “el fondo”, recogió puntos de vista positivos e inconvenientes respecto de esa política, que en ese mismo año adoptaron otros países, como Ecuador.

Ventajas

• La dolarización evita las crisis monetarias y de balanza de pagos. Sin moneda nacional no hay posibilidad de una depreciación fuerte, ni de salidas súbitas de capital motivadas por el temor a una devaluación.

• Se obtiene una integración más estrecha con las economías mundial y estadounidense gracias a que los costos de transacción son más bajos y a que se asegura la estabilidad de los precios en dólares de EE.UU.

• Con la dolarización, y al rechazar claramente la posibilidad de un financiamiento inflacionario, los países tienen la oportunidad también de reforzar sus instituciones financieras y de crear condiciones favorables a la inversión, nacional y extranjera.

Inconvenientes

• Es probable que los países se muestren reacios a retirar su propia moneda, un símbolo de identidad nacional, para escoger la de otro país. Desde el punto de vista práctico, es casi seguro que habrá resistencia política y que probablemente sea fuerte.

• Desde el punto de vista económico, el derecho a emitir la moneda del país otorga al gobierno unos ingresos de señoreaje, que aparecen como utilidades del banco central y que se transfieren al gobierno. Ese ingreso lo perderían los países que dolaricen y lo recibiría Estados Unidos a menos que consintiera en compartirlo.

• El país que dolarice su economía cederá toda posibilidad de tener una política monetaria y cambiaria autónoma, comprendido el recurso al crédito del Banco Central para facilitar liquidez al sistema bancario en situaciones de dificultad.

Fuente: Página 12