Más parejo y difícil que lo que muchos suponen
Si se coincide con que Nigeria es el rival más complicado supone una ventaja tener que jugar en la última fecha a la que podrían llegar los dos equipos clasificados, aunque sería duro si se llega a ese encuentro con la obligación de ganar.
Los antecedentes inmediatos no son muy alentadores para los nigerianos: perdieron 1-0 con República Checa, cayeron por 2-1 con Inglaterra y empataron 1-1 con la muy débil República de Congo, pero antes de eso, en noviembre habían superado a Argentina (sin Messi) por 4-2. Juegan bien, son rápidos, pero se desordenan tácticamente con mucha facilidad.
Entre sus figuras están: Alex Ibowi, sobrino de Okocha, del Arsenal (vive desde que tenía 4 años en Inglaterra); Kelechi Iheanacho, del Leicester, y Victor Moses del Chelsea, todos delanteros. Con ellos Nigeria ganó con mucha comodidad (4 victorias, 2 empates) la clasificación para Rusia, dejando atrás a rivales complicados como Camerún y Argelia.
El historial de los mundiales juega a favor de Argentina que se impuso en todos los enfrentamientos producidos hasta ahora: 2-1 en 1994, 1-0 en el 2002, 1-0 en el 2010 y 3-2 en el 2014.
De sus 23 jugadores solo uno (el arquero Kechukwu Eenwa) juega en Nigeria. Los demás están diseminados por toda Europa.
El primer rival de Argentina será Islandia. Si se considera únicamente que este será su debut mundialista; que se trata de un país pequeño (tanto como la provincia de Catamarca); que solo tiene 100 jugadores profesionales en la liga y que no le fue bien en los últimos amistosos –viene de empatar 2-2 con Ghana, luego de ir ganando 2-0–, quedaría la sensación de que no tiene ninguna chance frente a Argentina. Pero si se agrega el dato de que son muy altos, que tienen una convicción y una fuerza propia de guerreros vikingos y que en la última Eurocopa llegaron a los cuartos de final después de eliminar nada menos que a Inglaterra, ahí se empieza a equilibrar la balanza.
Poco se sabía del deporte islandés, más allá del resonante enfrentamiento entre Bobby Fischer y Boris Spassky en Reykiavik, en 1972, pero el fútbol llegó a los primeros planos cuando le ganaron a Inglaterra en el 2006 y cuando se clasificaron para el Mundial, relegando a Croacia que debió jugar el repechaje, y a Turquía, entre otros.
Una curiosidad: el técnico Heimir Hallgrímson, que también es odontólogo ya se ha reunido varias veces en un bar cercano al estadio con los aficionados (barrabravas “sui generis”) a quienes les adelanta cómo será la charla técnica y cual es la estrategia que se seguirá durante los partidos que juegan como locales.
En sus últimos amistosos Islandia perdió con México (3-0); con Perú (3-1) y con Noruega (3-2) y su futbolista estrella Gylfi Sigurdsson, sigue lesionado, pero aun así confían en que pueden formar un muro defensivo que les cierre todos los caminos a Messi y compañía.
La mención de Croacia remite inevitablemente a dos nombres Luka Modric e Ivan Rakitic, históricos rivales en la Liga Española porque uno brilla en el Real Madrid y el otro en Barcelona. Modric es un fenomenal volante que reúne todas las condiciones de un gran mediocampista: maneja los tiempos, mete pases filtrados, quita, tiene un gran despliegue. Expuso todas sus virtudes en la final de la Champions ante Liverpool. Es el cerebro del Real Madrid y de esta selección.
Rakitic que está muy afirmado en el Barcelona puede jugar con igual ductilidad por el centro y por los costados, tiene una gran dinámica y llega al gol. Ellos son los estandartes de la irregular selección de Croacia, que exhibe algunas debilidades defensivas y que se clasificó para el Mundial después de superar a Grecia en el repechaje. En sus últimos amistosos cayó ante Perú (2-0) y Brasil (2-0), venció a México (1-0) y el último viernes venció por 2-1 a Senegal, después de ir perdiendo. En Mundiales Argentina y Croacia, jugaron y una sola vez, en el 98. Ganó el equipo que por entonces dirigía Passarella por 1-0.
Todas las especulaciones caerán por tierra cuando empiece a rodar la pelotita.
Fuente. Pagina12