Venezuela: Habrá diálogo entre el gobierno y la oposición

El gobierno y la oposición de Venezuela anunciaron ayer que el miércoles próximo iniciarán un proceso de diálogo en Santo Domingo, República Dominicana, mientras Estados Unidos dispuso sanciones económicas para diez funcionarios chavistas a los que acusó de fraude electoral, censura y corrupción. Las negociaciones y la fecha de comienzo fueron confirmadas por el ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, horas después de que dirigentes opositores revelaran que estaban dispuestos a conversar con representantes del gobierno.

Julio Borges y Luis Florido, dirigentes de dos de los principales partidos opositores, reunidos nuevamente en el seno de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), dijeron en conferencia de prensa que el objetivo del diálogo es acordar condiciones para las elecciones presidenciales de 2018.

“Hemos desarrollado y desplegado nuestras relaciones con América latina para lograr condiciones electorales que nos permitan ir a las elecciones presidenciales”, afirmó Borges. “No estamos hablando de un proceso de facilitación que no cumpla las garantías; hay que abordar la crisis que viven los venezolanos, el caso de los presos políticos”, agregó Florido.

“Confirmo lo dicho por el jefe de vocería de derecha Florido, reafirmamos lo ya aseverado: el diálogo continúa el 15 de noviembre en la República Dominicana y allí estaremos”, escribió Rodríguez en su cuenta de Twitter.

El funcionario añadió que “está en preparación un documento conjunto para acuerdos en el marco de la convivencia y la paz”. Florido encabezó la delegación de la MUD que en septiembre participó en Santo Domingo de negociaciones, que no prosperaron, para la instalación de un diálogo con el gobierno chavista.

Borges pertenece a Primero Justicia (PJ) y Florido a Voluntad Popular (VP), dos de los cuatro partidos principales dentro de la MUD. Las dos agrupaciones crearon la semana pasada la coalición Venezuela Está Primero (VEP) tras distanciarse de Acción Democrática (AD) y Un Nuevo Tiempo (UNT), las otras dos fuerzas mayores de la antigua alianza opositora.

Las divergencias dentro de la MUD -que llevaron a algunos analistas a afirmar que la coalición había quedado disuelta de hecho- se hicieron públicas tras las elecciones de gobernadores del 15 de octubre y la convocatoria a las de alcaldes para el 10 de diciembre.

El quiebre con AD se debió a que los cuatro gobernadores electos de este partido resolvieron jurar ante la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) tras prometer que no lo harían y el de VP se rehusó, por lo que el chavismo declaró vacante su cargo y repetirá la elección en diciembre.

El conflicto se profundizó tras la convocatoria a comicios de alcaldes, porque UNT decidió presentar candidatos luego de que la mayoría de los partidos opositores resolviera abstenerse de concurrir. Las elecciones municipales provocaron fracturas incluso dentro de VP, que abrió procesos disciplinarios a sus dirigentes Delson Guarate y Yon Goicoechea, quienes anunciaron que serán candidatos a alcaldes pese a la abstención resuelta por el partido.

Guarate y Goicoechea fueron liberados la semana pasada –una vez que el plazo para inscribir candidaturas para los comicios municipales ya había vencido– tras permanecer más de un año presos, y el último admitió que eso se debió a negociaciones con el gobierno. “No hay manera de soltar presos políticos en Venezuela sin hablar con el gobierno, porque los presos políticos son del gobierno”, dijo Goicoechea ayer a la televisora Globovisión.

En tanto, Estados Unidos dispuso nuevas sanciones contra funcionarios chavistas a los que acusó de fraude electoral, censura a la prensa y corrupción en la distribución de alimentos. Las sanciones implican el congelamiento de todos los activos que esos funcionarios tengan en Estados Unidos y la prohibición a todo estadounidense a realizar transacciones con ellos.

Las medidas alcanzaron a los ministros de la Presidencia, coronel Jorge Márquez; de Cultura, Ernesto Villegas, y de Agricultura Urbana, Freddy Bernal; a las directoras del Consejo Nacional Electoral (CNE) Sandra Oblitas y Socorro Hernández, y al segundo vicepresidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Elvis Amoroso, entre otros.

En distintos decretos, Estados Unidos impuso sanciones económicas y migratorias a cuatro decenas de funcionarios civiles y militares del gobierno chavista, tanto durante la actual administración del presidente Donald Trump como en la de su antecesor, Barack Obama.

Esas medidas incluyen a Maduro y al vicepresidente, Tareck El Aissami. Este último está acusado por Washington de dirigir una organización que vendía pasaportes falsificados y de tener vínculos con el narcotráfico. Trump había advertido hace un mes que su gobierno no levantará las medidas contra funcionarios de Venezuela hasta que en este país “se restaure la libertad”.

Fuente: Página 12

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