Sexo: ¿Calidad o cantidad?
¿Cómo se compara la vida sexual? La cantidad es el primer conteo que la mayoría de las personas parecen hacer, pero, para los investigadores la calidad en relación a variables como los años de pareja y las edades resultan ser un indicador mucho más valedero y el reflejo principal del estado de la relación y de su grado de felicidad general. Porque «no hay dudas de que lo que sucede en el dormitorio es muy importante».
Según un estudio de la revista científica Greater Good, que recopiló varios trabajos sobre la frecuencia y calidad sexual en relación con el funcionamiento de las parejas: «La cantidad podría ser un obstáculo de las cosas que realmente importan». Por ejemplo, en este mes, investigadores entrevistaron parejas de más de 15 años y concluyeron que las que se comunicaban de manera más afectuosa y que usaban frases como «Te amo» tenían mayores relaciones sexuales.
Por otra parte, un estudio en abril del año pasado por Brian Joseph Gillespie, de la Universidad Estatal de Sonoma (EEUU), dividió a parejas de entre 50 y 85 años en cuatro grupos: alta frecuencia y satisfacción (35 %), alta frecuencia y baja satisfacción (10,5 %); baja frecuencia y alta satisfacción (12 %) y baja frecuencia y baja satisfacción (44%). El grupo de mejores relaciones compartía los patrones de estar muy en sintonía entre sí, implementando variedades como escapadas románticas, juguetes, masajes y hablar de fantasías.
Las parejas de los grupos mayoritarios tenían el sexo como una prioridad y comunicaban bien sus deseos y necesidades, indica la investigación. Mientras que, en el grupo de alta frecuencia pero baja satisfacción las relaciones resultaron aburridas y rutinarias, carentes de romance y donde a menudo uno de los integrantes no parecía estar interesados en tener relaciones, pero no hubo comunicación para resolver estas cuestiones.
«A veces estamos impulsados a desnudarse porque nos gusta mucho el otro; otras veces, las parejas recurren al sexo para solucionar sus problemas. Si tiene menos sexo, entonces, podría ser porque es insatisfactorio, o simplemente porque usted está satisfecho con su relación actual. El truco es entender qué condicionan mejor lo describe», arroja la investigación de J. K. Mc Nulty, C. A. Wenner y T. D. Fisher sobre las asociaciones longitudinales en el sexo.
¿La práctica hace al maestro? Sí. Pero no necesariamente la experiencia tiene que conllevar un aumento de frecuencia. «Puede que no tengamos la misma cantidad de relaciones sexuales como antes, pero la calidad es mucho mayor!», escribió una mujer en la encuesta y de eso parece tratarse el secreto porque las investigaciones arrojan que con el aumento de la edad disminuye la frecuencia, pero si aumenta la calidad, todo estaría mejor.
«La frecuencia de las relaciones sexuales y la medida en la que el sexo es gratificante se cree que reflejan la profundidad de toda la unión física y emocional de la pareja», observan Elizabeth A. Schoenfeld y otros en La importancia del sexo. Por eso, concluye el estudio: «En lugar de mirar hacia afuera para compararse con un promedio, probablemente se encuentre mayor satisfacción mirando hacia el interior de las propias necesidades y deseos, y la pareja».
Fuente: Diagonales